Como vamos recordando en otras entradas, la protección pasiva contra el fuego cada vez tiene una mayor importancia en la construcción actual. Impedir la propagación del fuego entre estancias es de vital importancia cuando se lucha contra el tiempo.
Un sistema muy utilizado son las almohadillas intumescentes, perfectas para sellar un paso de instalaciones cuando se prevén reinstalaciones frecuentes, cuando son sellados provisionales, o cuando el hueco es pequeño y se puede sellar con pocas unidades.
La instalación de almohadillas Promastop, aún comparándolo con otros sistemas más económicos, resulta más barata en caso de que el hueco a sellar sea pequeño.
Son saquitos construidos con un material intumescente que se expande alrededor de los 150º C, sellando los huecos e impidiendo el paso de humos y fuego.
Las almohadillas intumescentes son resistentes al agua, calor, luz, hielo y en general a los ambientes industriales, por lo que pueden instalarlas en practicamente cualquier sitio.
Su colocación es muy sencilla, sólo tienes que colocarlas con el lado largo en el sentido de las instalaciones y lo más presionadas posibles. Cuando se calientan se expanden y cubren todo el hueco.
No vale con poner una en medio del hueco y decir que «eso se expande y lo cubre todo», las almohadillas no funcionan así, se expanden, pero no tanto…
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